“Los dirigentes de Juntos por el Cambio recibimos un mandato de los tucumanos, expresado en el resultado de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias del 12 de septiembre: programa y unidad para gobernar Tucumán el año 2023”, adviertieron los dirigentes radicales Fernando Valdez, ex legislador; Raúl Cervantes, ex subsecretario de Extensión de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT); y Adolfo Díaz, ex concejal de Alberdi. “En las urnas resultaron elegidos dos referentes, Germán Alfaro y Roberto Sánchez, en el tope de preferencias para encabezar ese largo camino de dos años”, manifestaron, en respuesta a las declaraciones del intendente de Yerba Buena, Mariano Campero, quien puso como límite la candidatura a gobernador del diputado Roberto Sánchez para cualquier armado político.
“Seguridad, Trabajo y Producción son, entre muchos otros, los problemas cotidianos. Y a ellos debemos abocarnos”, reclamaron los “correligionarios” en un comunicado.
Precisamente, los militantes del centenario partido cuestionaron, también, que el jefe municipal de la “ciudad jardín” hable en enero de 2022 de eventuales postulaciones para el año que viene. Reclamaron, en ese sentido, que los problemas de la provincia y de los tucumanos estén antes que el anhelo de ocupar lugares de poder.
“En un enero con temperaturas infernales, sequía y un coronavirus que no se fue, las preocupaciones de los dirigentes de Juntos por el Cambio deben estar puestas en cómo vamos a solucionar esos problemas cuando nos toque gobernar. Y en lo que podamos aportar desde nuestras responsabilidades de gobierno en los cuatro municipios que tenemos a nuestro cargo”, manifestaron Valdez, Cervantes y Díaz. “No es momento para otra cosa que no sean esas prioridades”, remarca.
“Las PASO organizaron el debate interno de las candidaturas, ahora el programa de gobierno debe articular la unidad y ser el eje central para mostrar que somos el cambio”, añade. Y finaliza: “no hay margen para errores o para devaneos oportunistas”, finaliza.